Durante varios días he estado pensando si escribir esta entrada o no, pero creo que desde aquí me sentía en la obligación de recordar a Pablo Ráez, un chaval que podría ser alumno mío o yo alumno suyo, pues me ha dado una lección de vida... Aunque estemos en un pueblo de la sierra de Huelva, un poco alejados del bullicio de las grandes ciudades, todos deberíamos conocer la historia de Pablo, malagueño de 20 años, ejemplo de lucha y superación que ha dejado plantada una semilla en este mundo y en nuestros corazones...
Pablo era un tío deportista, practicaba Crossfit, Calistenia, Yoga... entre otros, estudiante del ciclo formativo de actividades deportivas, por circunstancias, fue a operarse de una lesión de rodilla y le detectaron leucemia, ahí le cambió la vida. Lejos de venirse abajo, desde que comenzó su tratamiento en 2015, inició el relato de su día a día en redes sociales, contando su experiencia como paciente de leucemia
en el Hospital Regional Universitario Carlos Haya de Málaga. Un año
después, lanzó la campaña en redes sociales #retounmillón. Su meta era
que el número de donantes en España llegase al millón de
personas. "Quiero concienciar, quiero ayudar, quiero poder hacer sentir
mejor a la gente... y con vuestra ayuda es posible", decía por entonces.
Concienció a muchos, especialmente en Málaga, donde en los últimos cuatro meses de 2016 las donaciones de médula se multiplicaron en un 1.400%.
El último dato del Ministerio de Sanidad y de la Organización Nacional
de Transplantes data del mismo mes en el que Ráez puso en marcha su hashtag, septiembre de 2016. Entonces, en España había 230.000 donantes de médula ósea. Forman parte del total de 28 millones de donaciones en todo el mundo.
Cuando Pablo comenzó con el #retounmillón ya contaba con casi 225.000
seguidores en Facebook y más de 330.00 en Instagram. Cinco meses
después, cada una de sus cuentas en redes sociales tiene 100.000
seguidores más. En sus publicaciones, siempre insistía en
la importancia de donar médula ósea. "Hay mucha información en
Google de cómo hacerlo y, reitero, ya no solo por Pablo Ráez, sino
porque hay miles de niños que necesitan un donante, porque hay miles de
enfermos, porque tú que estás leyendo esto podrías necesitarlo en
cualquier momento".
Su mensaje iba acompañado de mucha vitalidad y
optimismo, con un brazo flexionado que servía como su gesto
identificativo: 💪. Le encantaba practicar deporte, como solía recordar
en muchas de sus publicaciones en Facebook e Instagram. En uno de sus
últimos posts en Instagram, resume su visión positiva de la vida: "No sé
que será de mí, pero nunca lo he sabido. Lo que sé es que salgo de una
batalla para entrar en otra, pero es que no me rindo, soy Pablo Ráez
Martínez y yo no me rindo".
Su inquebrantable voz llegaba a todos los rincones de España. Su #SiempreFuerte inundaba las redes sociales. Actores como Dani Rovira o Antonio Banderas se involucraban en su valiente batalla contra la leucemia. Las donaciones de médula ósea se disparaban
en un mil por ciento...Recibía premios y homenajes...Todo estaba siendo
una increíble historia de superación que pedía un final feliz, pero su
muro de Facebook de repente se congeló. Sólo un mes antes de que
falleciese este sábado víctima de la leucemia.
La importancia de que Pablo Ráez, a sus 20 años, liderase el
#retounmillón se multiplica al tener en cuenta que los jóvenes son los
donantes clave, como explica la Fundación Carreras en su página web. A través de redes sociales, él se acercó a muchos de ellos. Según indicaba en su página de Facebook en septiembre de 2016,
los mensajes sobre la donación "han tenido mucha repercusión en los
medios televisivos y periodísticos", pero "no están llegando al foco más
importante, los jóvenes de aproximadamente 18 a 40 años".
"Estas edades se mueven más en las redes sociales, por eso es
importante que este mensaje le llegue a mucha más gente de esas edades.
Por eso te pido que si de verdad estas concienciado en este tema me
ayudes a difundir este mensaje, es muy importante crear esta cadena en
la que por suerte o por desgracia yo soy el representante", añadía en el
mismo post.
Que el número de donantes sea alto, como pretendía Ráez, es
fundamental para que aumenten las posibilidades de que los pacientes de
leucemia se puedan recuperar. A diferencia de la sangre, cuya compatiblidad entre personas es mucho mayor, la médula ósea es más difícil de compartir. Según indica la Fundación Josep Carreras en su web,
"una parte fundamental del sistema inmune es la información genética
que contienen las células, que denominamos sistema HLA (antígenos
leucocitarios humanos)". Por ello, según explica la Fundación, "se
necesita un elevado grado de compatibilidad HLA donante-receptor para
que las células del donante sano repueblen el organismo del paciente sin
ser rechazadas para que puedan hacer desaparecer las células enfermas
del paciente".
¿Desde el instituto pensáis que podemos hacer algo? Yo creo que sí, podemos concienciar a nuestrs conocidos para que vayan a donar sangre, médula, plaquetas... (una de las condiciones es que debemos tener más de 18 años, la mayoría no los tenéis) y si tienes la edad, HAZLO!! Cada mes viene un bus para que se hagan doncaciones de sangre (se pone en justo frente a EL TEBEO), vamos a intentar que la próxima vez que venga haya mucha más gente allí preparada para seguir con el #retounmillón.
"Ánimo a todas las personas que estéis en una dura batalla,
ánimo a todas las familias que estéis pasando una dura batalla, ánimo a
los que hayáis perdido a un ser querido, todo pasará y todo llegará. La muerte forma parte de la vida por lo que no hay que temerla sino amarla". Mensajes
tan reconfortantes como éste forman ya parte del legado de Pablo Ráez.
Gracias Pablo. Te llevaremos en el corazón. #SiempreFuerte
Pablo Ráez, la historia de un luchador. Pincha aquí
Donar médula es sencillo, puede que algún día tú o alguien que conozcas lo necesite. Pincha aquí
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